A la mañana siguiente fui a levantar a Renesmee pero cuando entré no la encontré en su cuarto. Comencé a llamar a Edward y cuando vio a mi expresión, me explicó que Renesmee estaba en el jardín jugando.
-Edward te he dicho que es peligroso- dije frustrada.
-Amor tranquilízate, yo sé dónde está Renesmee además que le puede pasar con una papá que lee las mentes y una mamá que tiene un escudo -dijo con una sonrisa que le llegaba a los ojos.
-Perdona Edward es solo que -no pude terminar la frase ya que Edward me dio un beso y no pude resistirme. Edward paró por unos segundo y comprendí.
- Renesmee va a entrar en 10 segundos -dijo Edward.
- Buen tendremos que terminar más tarde - dije algo apenada.
-Hola mami- me saludo Renesmee.
- Hola princesa, ¿ Qué quieres desayunar?
- No sé, tal vez cazar -dijo con tono persuasivo.
-Si tus tíos te llevan lo voy a pensar.
- Esta bien, pero le voy a decir al tío Emmett y a la tía Rosalie y ellos nunca me dicen que no- me dijo orgullosa de sus tíos.
-¿Qué vamos a hacer contigo?- dijo Edward en tono burlón resignado.
Renesmee llamó a Emmett y a Rosalie y como ella lo predijo el le dijo que sí, que venía por ella en 5 minutos porque se iba a poner su ropa de cazar.
Edward llamó Renesmee para poder cambiarla y peinarla. Edward siempre quería que nuestra hija se viera bien, aunque fuera a cazar.
A lo que Edward cambiaba a Renesmee fui a arreglar la sala, Renesmee había dejado sus juguetes y aproveché para guardarlos.
-Mira mami. ¿Cómo me veo? -preguntó curiosa.
-Te ves preciosa, como siempre -dije orgullosa.
-Renesmee dale un beso a mami que Emmett y Rosalie van a llegar en 15 seg. -dijo Edward.
Renesmee me dio un beso en la mejilla y justo en el tiempo que Edward había dicho Emmett y Rosalie tocó la puerta y Renesmee les abrió, al abrirle Renesmee le cayó encima a Rosalie y esta empezó a darle besitos en la cabeza a mi hija.
-Hola princesita -dijo Emmett- Que linda estas.
-Hola tío, gracias por el halago -dijo con una sonrisa.
-Hola hermanitos, ¿Cómo están? -pregunto con sarcasmo, veo que todavía la casa sigue sin un rasguño.
Rugí por unos debajo, siempre me molestaba que Emmett, haga esos comentarios y peor aún en frente de mi hija.
-Emmett, te acuerdas de nuestra pequeña apuesta -dije con sarcasmo .
-Si por cierto, quiero la revancha -dijo con algo de enojo.
-Qué bueno que te acuerdas, porque si mal no recuerdo tu prometiste algo, y no creo que no cumplas tu palabra -al terminar la frase Edward comenzó a reírse y no pude aguantarme y reírme yo también.
-Hermanita, siempre cumplo con mis palabras -dijo gruñendo-
-No parece -dije molesta.
-Bueno, ya basta que mis tíos Emmett y Rosalie vinieron por mi -dijo Renesmee disgustada.
-Lo siento princesa. Dile adiós a tus padres -dijo Emmett.
-Adiós, no me esperen -dijo con alegría.
Edward y yo nos dirigimos a la casa grande para hablar con Carlisle, sobre el instituto, cada día estaba más cerca de entrar a la escuela.
Cuando llegamos, nos topamos con algo inesperado. Eran Jasper y Alice que estaban discutiendo. Al ver tal cosa mire a Edward y el también estaba sorprendido de ver algo tan raro.
En todo este tiempo, nunca había visto a Alice y Jasper discutir. ¿Qué habría pasado?
-Edward, ¿Qué pasa? -pregunté preocupada.
-Lo que pasa es que Peter y Charlotte tienen un problema y Jasper quiere ir a ayudarlos y Alice dice que puede ser peligroso para él. -me respondió con tono preocupado.
-Alice entiende son mis amigos -dijo Jasper gruñendo.
-Lo que tú no entiendes es que eres mi mundo y si te pasa algo no sé cómo seguiré. -dijo triste.
-Alice que me puede pasar -dijo abrazándola- si tu no ves peligro no entiendo que me puede pasar.
-No, lo sé pero..... -Jasper la interrumpió con un beso y Alice no pudo decir lo que quería.
-Edward, por favor habla con Alice y explícale que no me va a pasar nada, los Cullen son una de las familias más fuertes -dijo Jasper orgulloso.
-Alice -Edward iba a a comenzar a hablar pero Alice se fue de la habitación y se dirigió al jardín-.
-Jasper creo que debes hablar con Alice por qué está muy molesta contigo -dijo Edward preocupado.
Asintió con la cabeza pero antes de irse Jasper pudo sentir mi preocupación y comenzó a clamarme.
-Bella, tranquila -dijo Jasper con una sonrisa.
-Jasper, no puedo evitar preocuparme, eres mi hermano y eso hace la familia -dije aún más preocupada.
-No, no lo hagas estaré bien.
-Jasper, estás seguro que Peter y Charlotte están en problemas -dijo Edward conteniendo la risa.
Pude ver que Edward había descubierto la verdaderas intenciones de Jasper, pero no pasó por mi mente que había visto Edward que el problema de Peter y Charlotte la causara gracia.
Me quedé parada, pensando en lo que mi esposo había visto, por lo que Edward me agarró por el brazo y me condujo hasta el despacho de Carlisle.
-¿Podemos pasar? -preguntó Edward parado en frente de la puerta.
Carlisle se encontraba sentado en un escritorio de caoba, se podían ver que los detalles fueron tallados a mano.
-Claro que pueden, vengan y tomen asiento, -hizo ademán para que nos sentáramos en un sofá que había en el extremo izquierdo de la habitación.
-Carlisle, queríamos hablar contigo acerca del instituto -dijo Edward mientras se recostaba en el sofá y me acomodaba al lado suyo.
-No entiendo por qué mencionas ese tema Edward -dijo Carlisle confundido- aún falta mucho tiempo para que tengamos que preocuparnos.
-Sí, eso lo sé Carlisle, pero no es a eso a lo que me refiero.
-Entonces, ¿A qué?
-Bella y yo nos estábamos preguntando si deberíamos incluir a Renesmee también en este año que viene.
-Lo más favorable sería que no.
-¿Estás seguro Carlisle? -dije para tratar de convencerlo.
-Dejarla aquí sería lo mejor Bella, aunque el crecimiento de Renesmee disminuya cada día, todavía sigue siendo acelerado comparado con el ritmo de crecimiento de un humano -me explico Carlisle-.
-Pero entonces, ¿Cuándo podría Renesmee entrar al colegio? -Esta vez fue Edward el que preguntó.
-Según mis cálculos, podría ser un par de años antes de su transformación definitiva.
Carlisle pudo notar mi cambio de ánimo, el se paró de su escritorio y se sentó a mi lado y comenzó a abrazarme.
-Bella, no te preocupes, Renesmee va a estar bien, ella se quedará en la casa con Esme.
-Carlisle, se que Renesmee estará bien con Esme, lo que me preocupa es que no sé si aguantaré tantas horas sin ver a mi hija -dije preocupada-.
-Amor, cuando no tengas ganas de ir al instituto no vayas, -dijo Edward resignado.
-No importa, Carlisle te puedes ir, Bella y yo entendemos que tengas que ir a trabajar -dijo Edward-.
-Carlisle no te preocupes -dije con una sonrisa.
Cuando Carlisle se paró me dio un beso en la frente y tocó el hombro de Edward.
-Edward ahora que estamos solos, de que te reías ahorita -dije con enojo-
-Dame un momento amor, que Jasper me está llamando -Antes de irse me dio un beso y bajo las escaleras.
Me quedé inquieta, ¿Por qué Edward me ocultaba la verdad?. Esperé como 2 minutos y cuando iba a buscar a Edward el ya venía subiendo las escaleras con una sonrisa que iluminaba mi mundo.
-Ya me puedes decir cuál es tu misterio -pregunté impaciente-.
-Amor, -hizo ademán para sentarme pero negué con la cabeza. ¿estás molesta? dijo casi riéndose-
-No es gracioso Edward -dije molesta- es que no te das cuenta que Jasper puede estar en peligro -le aclaré preocupada-.
-Isabella Marie Swan de Cullen, es solo una excusa que Jasper le dio a Alice, lo que pasa es que pronto es su aniversario y Jasper no quiere que Alice sospeche su regalo, por eso llamó a Peter y Charlotte para que lo ayudaran a planear la sorpresa. Eso era todo.
-Lo siento Edwards no debí.... -no me dejó continuar y me dio un apasionado beso, me lancé encima de él, pero a los pocos segundos se detuvo y me miró con su cara angelical, en ese mismo momentos supe que Renesmee ya había llegado.
A los pocos segundos Emmett, Renesmee y Rosalie entraron por la puerta, mi hija sonriente como siempre y Emmett haciendo chistes.
-Emmett, tranquilízate -dijo Edward muy paciente-
-Pero Edward si todavía no he dicho nada -dijo sonriente-.
-Solo tranquilízate Emmett.
-Nessie, ¿por qué no le cuentas a tu amargado padre cómo te fue hoy? - le sugirió Rosalie a Renesmee mientras acariciaba su pelo-.
Renesmee saltó hacia los brazos de su padre quien la agarró sin problemas y luego puso su mano en la mejilla de Edward.
-¿Hiciste eso? -dijo Edward con sorpresa.
Renesmee asintió con la cabeza y luego se dirigió hacia los brazos de Rosalie y puso su mano en la frente de ella.
-No sé, ¿A dónde quieres ir?
-Si por qué no -dijo Rosalie- pero primero tienes que preguntarle a tus padres.
-Renesmee quiere saber si la dejarían ir a la playa esta noche con Emmett y con migo - me dijo Rosalie.
-Claro que puedes ir contestamos Edward y yo al unísono.
-Entonces te estaremos esperando princesa -le dijo Emmett-.
Renesmee se dirigió con Rosalie y Emmett al cuarto para ordenar las cosas. Yo me dirigí al cuarto de juegos de Renesmee para ver si estaba ordenado, parecía siempre un huracán después de que mi hija terminaba de jugar.
Me sorprendí mucho al verlo tan organizado, seguro que Esme lo organizó, este cuarto podría ser un departamento de una tienda de juguetes. No me había dado cuenta de que mi esposo estaba detrás de mí, me dio un beso en el cuello y comenzó a abrasarme por la espalda.
-¿Qué pasa amor? -preguntó un poco preocupado.
-Es que Esme no debería de arreglar la habitación, no es su responsabilidad -dije apenada-
-Sabes que a Esme no le importa hacerlo, en realidad le gusta mucho los niños sabes lo susceptible que es con el tema de los niños.
-Ya lo sé Edward, pero pienso que le estamos dejando nuestras responsabilidades a ellos.
-Recuerda que Renesmee es la princesa de la casa -dijo encogiendo sus hermosos hombros.
-Lo sé Edward pero somos sus padres, su responsabilidad, no le debemos dejar nuestros deberes a los demás, no es justo
-Está bien Bella, mi amor, si es lo que quieres, le diré a Esme que sólo ordene el cuarto de vez en cuando.
-De acuerdo.
La semana paso normal como todas, por fin había llegado el viernes, lo que quería decir que Jacob venía hacia la casa.
Renesmee estaba muy emocionada porque Jacob venía. Edward como siempre no estaba de acuerdo con la visita de mi amigo.
Renesmee se puso uno de los vestidos que Rosalie le compró ayer. hizo que Alice le hiciera un pequeño cambio. Mi hija estaba realmente Hermosa, nunca la había visto tan emocionada.
Jacob había dicho el día anterior que vendría en el vuelo de la tarde así que me puse a organizar el curto de huéspedes.
A todos nos sorprendió escuchar un carro en la carretera, la única persona que esperábamos era a Jacob y el siempre llegaba en forma lobuna.
Edward al poco rato nos informó que era Jacob quien venía con otra persona, Renesmee estaba tan desconcertada como yo. ¿Quién podría haber traído Jacob?
Jacob entró a la casa y presentó ante todos a su novia Camille. Era una muchacha de aproximadamente 17 o 18 años, su tez era del mismo color de la de Jacob o quizás un poco más clara, su pelo era largo y negro oscuro, con ligeros mechones rubios, llevaba puesto un vestido primaveral que resaltaban el color de sus ojos. Al escuchar esto Renesmee se fue a su cuarto corriendo.
-Camille esta es Bella, mi mejo amiga y su esposo Edward -dijo Jacob con una sonrisa, seguramente no se había percatado de que Renesmee no estaba o simplemente no le importaba-
-Mucho gusto, Jacob siempre me habla de ustedes -dijo con tono sincero y ligeramente nervioso-
-Ellos son los hermanos de Edward -dijo Jake señalando a cada uno con su nombre- Emmett, Jasper, Alice y la Barbie ó Rosalie -dijo riéndose del último nombre-.
Rosalie casi le tira algo a Jake pero Emmett la agarró disimuladamente por la espalda.
-Camille, quieres conocer la casa -dijo Alice con agrado-.
-Claro, me encantaría.
Alice llevo a Camille a un recorrido por la casa. Yo aproveche para hablar con Jake.
-¿Jacob, por qué haces esto?
-¿A qué te refieres no te entiendo Bella?
-¿Por qué hieres a Reneesme sabes que ella te quiere mucho y de una manera muy especial?
-¿Pero a qué te refieres?-digo con tono preocupado, al parecer no estaba consciente del daño que le hacía.
-Es que no ves que estás jugando con los sentimientos de mi hija-esta vez estaba realmente enojada, la furia empezó a nublar mi mente, sentí una sensación de deja vu de aquella vez que lo ataque por que supe que estaba improntado de mi hija. Al parecer Jasper también, ya que entro a la habitación cuando percibió mi estado de ánimo y empezó a tranquilizarme.
-Jacob te llama Edward--dijo de Jasper de modo muy despreocupado.
-Jacob todavía no he terminado de hablar contigo- le dije de una forma molesta.
-Lo sé Bella pero tu esposo me está llamando y no quiero hacerlo esperar- lo dijo de una forma despreocupada, eso fue el colmo de no hubiera sido por Jasper le hubiera arrancado la cabeza .
Jacob entro donde se encontraba mi esposo.
-Edward podrías decirle a tu mujer que no se meta en mi vida personal-dijo con tono molesta.
-Jacob, no le puedo decir a Bella que hacer, no soy su amo solo soy su esposo-dijo con tono tranquilo.
-para que me llamaste -le dijo de forma intrigada.
-Jacob te pido que por favor cuando vengas a visitar a mi hija, no la pongas a llorar -Edward lo dijo de forma molesta.
-¿Qué dices si ni siquiera he visto a Reneesme? - le contesto de forma preocupada
-Ese es el punto Reneesme tiene 2 semanas sin verte y tú la ignoras.
-¿Dónde está Reneesme?
-Está en su cuarto llorando-dijo Edward educadamente furioso. No sé cómo es que logra controlarse .
-necesito hablar con ella-dijo con urgencia-necesito explicarle las cosas.
Jacob se paro y se encamino al cuarto pero Rosalie se le planto al frente
-Quítate del frente Barbie -se estremeció ligeramente imperceptible para un humano.
no había pasado ni 2 segundos y ya Emmett se encontraba al frente de Rosalie protegiéndola de Jacob.
-Por qué no lo intentas perro -gruño Emmett en voz alta, haciendo que las paredes se estremecieran.
-Jacob, te recuerdo que tu noviecita está hablando con Alice en el jardín, supongo que no quieres que Camille se enteré de tu pequeño secreto -le recordó Edward a Jacob en forma cautelosa entrecerrando los ojos-.
Esto hizo que Jacob volviera a la realidad, cerró los ojos y empezó a calmarse, respiro hondo y volvió a abrir los ojos.
-Solo quiero hablar con la niña Edward -esta vez habló con voz calmada y con paciencia, era obvio que Jacob estaba haciendo un gran esfuerzo por mantenerse calmado.
-el problema es que no estás tomando en cuenta que ella no quiere verte Jacob, está dolida y pienso que lo mejor sería que te fueras para que ella pueda tranquilizarse, te recomiendo que vuelvas mañana, ya que seguro Renesmee estará más tranquila.
-Lo siento Edward, pero no me iré a ningún sitio sin hablar con ella-.
No entendía a Jacob, si tanto quería a mi hija por qué la lastimaba así, estaba tan enojada que en menos de 2 segundos ya tenía más de mil formas para matarlo. Desgraciadamente Jasper se había dado cuenta, así que empezó a utilizar su don, pero eso no me tranquilizó lo suficiente así que Jasper le dijo a Edward que me sacara de la habitación.
-Bella amor, tranquilízate, nada resolverás enojándote.
-Edward, es que no comprendes ¿Qué podemos hacer con Reneesme?
.No lo sé, Renesmee es solo una niña y Jacob se está comportando como un niño, para mí lo mejor que podemos hacer con Renesmee es alejarla de Jacob por un tiempo.
-Edward sabes que Renesmee no se puede separar de Jacob, no creo que debamos ser tan drásticos -le dije medio preocupado-.
-Bella no permitiré que Jacob le haga daño a nuestra hija -sólo se le podía ver a Edward preocupación en su rostro-.
-Edward se que quieres proteger a Renesmee, pero también ten en cuenta que Renesmee quiere mucho a Jacob y aunque se esté comportando de un modo sumamente infantil, ten por seguro que él quiere mucho a Renesmee, solo quiere verla feliz.
Edward se quedó pensando en lo que le había dicho, pero e3n ese momento escuchamos ruidos que provenían de la casa, Edward y yo salimos corriendo hacia la casa y cuando llegamos escuchamos grito por do quiera. pero lo que más me llamó la atención es que mi hija se encontraba llorando.
-Jacob, que le hiciste a Renesmee -le pregunté sumamente enojada-
-Nada Bella, te lo juro, solo que Esme bajó con Renesmee y ella vio sentada a Camille y empezó a llorar, en ese momento llegaron ustedes.
-Jacob es que no te das cuenta es solo una niña -de no haber sido por Jasper, lo más probable es que ya le hubiera saltado encima a Jacob-.
-Lo sé, pero que quieres que haga -preguntó frustrado-.
-Quiero que cuando vuelvas a visitar a Renesmee, no vuelvas a traer a tu amiga a esta casa y si pretendes volverla a traer llama y avisa con tiempo-.
-Disculpen - intervino Camille- no entiendo que tiene que ver mi precensia con que tu hija se ponga a llorar -dijo con cierto tono de arrogancia-
-No te preocupes Camille, conozco a Renesmee desde que nació, ella es muy especial para mí -Jacob lo mencionó de una manera tan sincera que por un momento llegó a pensar que era cierto pero luego los recuerdos de mi hija llorando llenaron mi mente que hizo que mi ira volviera instantáneamente-.
-Jake si la quisieras tanto no la hubieras herido -le recordé con tono sarcástico-.
-Bella, Renesmee quiere verlos a ti y a Edward. -intervino Alice.
-Jacob, será mejor que vuelvas mañana, así todos estaremos más calmados -dijo Edward tratando de tranquilizarnos a todos.
-Está bien, volveré mañana, dale a Nessie un beso de mi parte, dile que lo siento mucho.
Luego de que Jacob se fue Edward y yo no dirigimos a ver cómo Renesmee estaba. Edward comenzó a abrazarla y darles besitos, pero sabía que mi hija sólo se hacía la fuerte para no preocuparnos.
-Renesmee sabes que Jacob te quiere y mucho, solov que eres muy pequeña para ser su novia. -la voz de Edward no se escuchaba triste o deprimido mas bien era satisfactoria-.
Renesmee solo se limitó a acentuar con la cabeza.
-Entonces. ¿Cuál es el problema princesa? -pregunto Edward con cautela, seguramente por algún pensamiento que Renesmee había tenido.
-Renesmee puso su mano en la cara de Edward y después en la mía, nos mostró que se sentía celosa, ella pensaba que Camille era más bonita que ella.
-Princesa sólo hay una mujer que iguala tu belleza y es tu madre. Ustedes son las únicas mujeres más bellas que he visto en mis 112 años de vida.
Pero Renesmee negó con la cabeza negando lo que Edward había dicho.
En ese mismo momento entraron Rosalie y Alice para intentar animar a Renesmee.
-Princesa sé lo que te va a levantar ese ánimo -le dijo Alice muy contenta.
-¿El qué? -le preguntó Renesmee muy curiosa-.
-No adivinas princesa -esta vez fue Rosalie la que habló.
-COMPRAS!! -dijo Renesmee feliz-.
-No te ofendas Bella, pero Nessie no parece tu hija, por lo menos no sacó tu gusto para las modas. -me dijo Alice en tono burlón-.
-Todavía hay más -dijo Rosalie con tono intrigante, que dejó a Renesmee muy inquieta.
-¿Qué es? -Renesmee preguntó impaciente-.
-Tus tíos Jasper y Emmett te van a comprar todo lo que quieras, si es necesario hasta las tiendas.
Renesmee se despidió de Edward y de mí y se fue escaleras abajo a buscar a sus tíos.
-Sabes Edward a veces creo que malcriamos mucho a Renesmee.
-¿Por qué lo dices?
-Porque no todos los niños de la edad de Renesmee tienen unos tías que para hacerla sentir mejor le compran un centro de comerciales.
-Bella sabes lo que implica tener a Alice de familia, tu eres la única que se ha resistido a sus caprichos -Edward me mencionó en forma de burla.
Ya cuando Renesmee se fue Edward y yo nos dirigimos a nuestra cabaña. Mi esposo comenzó a tocar el piano, hacía mucho que no lo escuchaba cantar, el estaba cantando mi nana.
Me acerque a donde él estaba tocando, lo abrasé por la espalda, el dejó de tocar dio la vuelta y comenzó a besarme apasionadamente, yo envolví mis brazos en su cuello y él en reacción me cargó hacia nuestra habitación.
